Este «Viacrucis», se sitúa en la carretera de Baños de Molgas (salida por el parque de Ansuiña) en dirección al Monte Medo.
Cronológicamente es actual, de finales del s. XX.
Su interés radica en ser ejemplo de religiosidad en la sociedad rural gallega, en la que el crucero y el camino, simbolizan la unión sagrada del alma, de persoas vivas y muertas.
Un paseo muy recomendable de aproximandamente 4 kilómetros.